La forma en que te presentas físicamente puede transmitir un mensaje de confianza y seguridad. Una postura erguida, un contacto visual firme y gestos abiertos pueden hacer que parezcas más seguro y accesible, lo cual es crucial para ganar la confianza de tu audiencia. 

El lenguaje corporal puede ayudarte a establecer una conexión emocional con tu audiencia. Sonreír, hacer contacto visual y usar gestos expresivos puede hacer que tu audiencia se sienta más cercana a ti y receptiva a tu mensaje. 

Los gestos y movimientos corporales pueden enfatizar y aclarar tus palabras. Por ejemplo, usar las manos para ilustrar puntos clave o moverte intencionalmente por el escenario puede ayudar a resaltar y reforzar tu mensaje. 

El lenguaje corporal genuino y natural hace que te perciban como una persona auténtica y sincera. Las audiencias tienden a responder positivamente a los oradores que parecen genuinos y honestos en su comunicación.